85 Unidades de Vivienda Social de Cornellà, finalista al Mies van der Rohe

Las 85 Unidades de Vivienda Social de Cornellà de Llobregat, a cargo de Peris + Toral Arquitectos son el único proyecto español finalista a los Premios de Arquitectura Mies van der Rohe. Otro proyecto catalán, La Borda–Vivienda Cooperativa, opta al galardón de mejor arquitectura emergente.

José Toral, corresponsable del estudio, reconoce que la noticia les sorprendió: «Para nosotros es un halago que un edificio de viviendas de protección oficial esté entre los cinco finalistas», explica a NIUS. El coste de construcción ha sido de 950 euros el metro cuadrado. Sus artífices, José Toral y Marta Peris, son profesores de la Escuela de Arquitectura de Barcelona.

Pero el jurado del galardón europeo no se ha fijado en los precios sino en el uso de los espacios. El edificio finalista, construido sobre una superficie de 10.000 metros cuadrados, «plantea una forma distinta de habitar», según sus creadores. Suma módulos idénticos que el residente decide cómo distribuir.

Así, las 85 Unidades de Vivienda Social de Cornellà están formadas por módulos de 12-13 metros cuadrados para que los usuarios decidan qué uso les dan. El proyecto ha eliminado los pasillos y las estancias no tienen jerarquía: «Todas las habitaciones son iguales, que miden lo mismo que el comedor o sala de estar», aclara Toral.

Los arquitectos reconocen que 13 metros para una habitación puede ser un tamaño amplio pero no para un salón: «Jugamos con la porosidad, los pasos entre salas miden 1,60 metros de ancho en lugar de puertas de 90 centímetros, con puertas correderas. Así, cuando están abiertas, la sala suma la cocina y el comedor«, explica.

Las viviendas de dos dormitorios cuentan con 4,5 módulos y las de tres dormitorios suman seis módulos. Todas tienen dos terrazas: «Diseñamos el proyecto antes de la pandemia pero el confinamiento reforzó esta idea: necesitamos salir al exterior«, reconoce toral.

Aseguran los arquitectos que las viviendas están pensadas en «perspectiva de género» y la cocina se sitúa en el núcleo central de la casa: «Históricamente era un lugar proscrito que no se podía enseñar si había platos sucios. Ahora es el eje vertebrador, está a la vista de todos, y ayuda a evitar los roles de género», explica Toral.

El estudio de arquitectos finalista está especializado en viviendas de protección oficial. En estos momentos tienen varios proyectos similares en marcha: «Acabaremos 43 viviendas en Ibiza con paredes de tierra compactada que no requiere de sistema de calefacción activa, es todo pasivo, y ha obtenido la calificación energética A», explica Toral. En el barrio del Poblenou de Barcelona están construyendo 140 viviendas de alquiler social para gente mayor.

El edificio de cinco plantas de las 85 Unidades de Vivienda Social está construido en madera, salvo el sótano y la planta baja, que están hechos de hormigón. «Es el edificio más grande de España construido en madera, de 10.000 metros cuadrados«, afirma Toral. Las familias entraron a vivir en el verano de 2021.

Peris + Toral reconocen la preocupación de los arquitectos por reducir la huella ambiental. «El 60% de la contaminación en construcción es por culpa del hormigón», explica Toral. El proceso de fabricación para conseguir portland obliga a calcinar la piedra a temperaturas superiores a 2.500 ºC, «esto supone un coste energético inmenso», aclara.