Aventuras submarinas con un 911 refrigerado por aire

Cuando el sol veraniego salió sobre Gdynia, una ciudad portuaria de Polonia, una gran multitud se reunió en el muelle para contemplar una forma extraña pero familiar. Suspendido en lo alto estaba la inconfundible silueta de uno de los primeros 911, su carrocería roja descolorida estaba casi completamente cubierta con una densa maraña de corales y algas.

Lo que presenciaban perplejos los espectadores no era, a pesar de las apariencias iniciales, el rescate de un Porsche perdido bajo el mar hace mucho tiempo. Por el contrario, se trataba de una instalación artística creada para el festival anual ‘Gdynia Design Days’ por los artistas conceptuales Ada Zielinska y Rafal Dominik. Jugando con los temas del festival de 2022 en torno al océano y el cambio climático, los artistas crearon una visión fantástica de un arrecife artificial, utilizando un 911 real refrigerado por aire y una narrativa onírica que imagina cómo este precioso automóvil podría haber sido abandonado en el Báltico durante varias generaciones.

“La historia comenzó cuando Porsche nos invitó a preparar una instalación para los ‘Design Days’”, dijo Zielinska. “Rafal y yo queríamos hacer algo que conectara a Porsche con el mar y nos inspiramos en la exposición de Damien Hurst en la Bienal de Venecia de 2017, que mostraba artefactos antiguos aparentemente extraídos del océano que estaban cubiertos de coral. La gente está creando arrecifes con autos viejos y barcos hundidos hoy y pensamos que sería interesante usar un 911 clásico de una manera similar y exhibirlo junto al mar”.

Encontrar el auto para un viaje artístico tan extraordinario

El primer desafío fue quizás el más grande: encontrar el automóvil para un viaje artístico tan extraordinario. Marek Sworowski, director de marketing de Porsche Polonia, comenzó la búsqueda. Con la ayuda de todos los contactos de la empresa en el país tenía que encontrar un Porsche cuyo propietario pudiera ver cómo su auto se convertiría, aunque fuera temporalmente, en un arrecife artificial.

“Fue difícil encontrar a alguien que nos permitiera hacerle esto a su auto”, dijo Sworowski con una sonrisa. “Restringimos la búsqueda a las personas que tenía autos a punto de ser restaurados, y cuando encontramos un 911 T de 1973, parecía la elección perfecta. Independientemente de lo que lo cubriera, todos reconocerían esa forma tradicional del 911”.

El proceso artístico vería a Zielinska y Dominik crear estructuras de coral artificial utilizando impresión 3D y conchas marinas trituradas, uniendo las formas terminadas a la superficie del automóvil durante un período laborioso e intensivo de dos semanas. Cuando terminó, el automóvil no se parecía en nada al elegante y hermoso Touring de la serie F que, hasta unos días antes, había estado esperando en silencio su restauración de fábrica. “El propietario confiaba mucho en nuestro enfoque y realmente creía en el proyecto”, dijo Sworowski”. “¡Simplemente nos pidió que no arrojáramos su auto al mar!”.

Presentación en el festival ‘Gdynia Design Days’

Cuando la pieza terminada, titulada ‘Sunken Romance’ (‘Romance Naufragado’), fue presentada por primera vez en el festival ‘Gdynia Design Days’, izada sobre el puerto por una grúa, comprensiblemente, los espectadores quedaron atónitos. “Mucha gente estaba bastante sorprendida”, dijo Ada, “y realmente pensé que había sido sacado del mar. La gente se movía hacia él desde todas las direcciones, sacando sus teléfonos para tomar fotos”.

La instalación se convirtió rápidamente en una sensación en internet entre los fanáticos de Porsche y la comunidad artística en general, pero después de que concluyó el festival, el automóvil pronto fue despojado de su revestimiento de coral y devuelto a su propietario para que pudiera comenzar el trabajo de restauración. Sin embargo, el éxito del proyecto llevó a Zielinska a ponerse en contacto con Porsche nuevamente y sugerirle la creación de un cortometraje que imaginara la historia de los orígenes de ‘Sunken Romance’. El resultado, dirigido por Zielinska y Dominik Panasiuk, es una exploración cinematográfica surrealista del amor prohibido, entre sirenas y mortales, entre autos antiguos y sus devotos conductores. Puede verlo a continuación.