Construcciones antisísmicas, la seguridad frente a movimientos telúricos
Durante el encuentro “México sísmico”, especialistas de la ingeniería analizaron la situación de México ante los temblores y lo que representan para las estructuras inmobiliarias, así como el desarrollo de nuevas construcciones antisísmicas.
Por un lado, Alejandro Rico, presidente de la Sociedad de Ingenieros Valuadores, celebró que hoy existen más y mejores opciones para edificar a gran escala sin olvidar la seguridad.
Además, detalló que hay nuevas tendencias en las que los especialistas se preparan para planificar de acuerdo al suelo donde estará la obra. A esto, se le suman estudios más completos y herramientas a su disposición.
“Por ejemplo, para quienes buscan saber qué grado de riesgo se tiene en cada zona, existen planos de las 16 alcaldías de la Ciudad de México”, señaló.
Al respecto, el presidente pidió que los institutos y teóricos sigan dando información así de sencilla para seguir construyendo.
“Los mapas están en el Colegio de Ingenieros Civiles de México (Cicm) y son públicos para todos los interesados”, compartió.
Estructuras para reducir el impacto telúrico
Por su parte, Andrés Bladinieres Correa, ingeniero estructural de Rocacero, hizo hincapié en el desarrollo y la evolución de las construcciones antisísmicas y su capacidad de reducir el impacto ante un movimiento telúrico.
“Hay aisladores físicos, como los péndulos, que separan la edificación del suelo. Esto logrará que el suelo se mueva, pero la estructura no”, explicó el experto.
Para Bladinieres, estos elementos evitan que se caigan plafones a las personas, que los hospitales sigan funcionando o que los puentes no representen un problema para los peatones.
Construcciones antisísmicas destacadas a nivel mundial
Un ejemplo de los ejemplos más eficientes de construcciones antisísmicas es utilizado en Taiwán, para el edificio Taipéi 101: el Dámper Baby.
Este consta de un mecanismo muy simple, que está constituido por un péndulo o una bola de acero y hormigón de 680 toneladas. Al estar suspendida por unos cables o soportes especiales de acero de un diámetro de 8.9cm, es capaz de reducir un 40% de las vibraciones en el edificio.
El sistema actúa a través de las vibraciones, moviéndose al lado contrario. La prioridad de este método es columpiarse y hacer tolerables los ciclones y movimientos sísmicos de la tierra.