La Cara Oculta – Duodécima edición del festival Celsius 232

Ya es Celsius, el festival literario cultural dedicado al terror, la fantasía y la ciencia ficción.

Ardían ayer las redes sociales por el calorazo malo, aunque en Avilés no parecían estar mal, y también por multitud de fotos, al uso de estos saros, y mezcladas con un toque de turisteo muy majo.

Leía yo y miraba: gente nueva, gente consolidada, algunos que renegaron y que han vuelto, los infalibles de siempre, reconocidos e, incluso, famosetes de tierras extranjeras.

Muchos amigos, algunas ausencias notables, y también salseos, dimes y diretes, cotilleos que sólo interesarán a los muy cafeteros del fantaterror español y a la endogámica comunidad que se origina en escritores y creadores, que se alarga al fandom y que contagia a la cadena de producción y distribución del tema literario.

Yo siempre espero que en el Celsius se laven con sangre las ofensas virtuales; que las polémicas y broncas subidas de tono lleven a duelos de honor; que brille el acero al igual que brillaron los afilados y mordaces comentarios.

Pero luego…. náh, ya nadie se acuerda del viaje pagado por no sé qué distribuidora, ni del pollo aquel entre dibujantes del “que yo soy más que tú que curro en USA”; ni de la que era machista porque una que era feminista se lo dijo porque escribió un prólogo para blanquear a otro que decía que las mujeres tienen pechos turgentes…

Así no se puede crear un malditísmo en condiciones. No pido yo cadáveres, no, no, pero un cruce de armas de las de rol o un par de galletas de réplica de letal intención… pues…

En fin, que este suelto va de informar y de promocionar un poco esta cita indispensable si te gusta la literatura más alternativa, no de mis cosas de rubia pendenciera.

Lo más importante, quizás lo más destacable de esta edición, es que es la primera sin Fernando Marías y en ella se le va a rendir homenaje.

Marías, entre otras muchas cosas, creó «Hijos de Mary Shelley», que fue en principio una propuesta que aglutinaba a distintos escritores para que escribiesen y declamasen textos de fantasía o terror. En esos recitales participaron gente de tanto renombre como Espido Freire, Raquel Lanseros, Lorenzo Luengo, María Zaragoza o Emilio Bueso.

«Hijos de Mary Shelley» se ramificó luego en compañía de teatro y en un publicación digital (creo, hablo de memoria), y este es el legado, al respecto, de Marías a quien quienes le conocieron y trataron, como Cristina Macia, Rosa Huertas, Luis Antonio Muñoz, Jorge Iván Argiz, Javier Olivares, José Carlos Somoza van a recordar.

Todo el mundo destaca la calidad humana de Marías, me gustaría poder adheridme a la opinión general, pero tras las contadas ocasiones que pude tratarle, debo decir que me decanto antes por el autor que por la persona. En todo caso, es una firma y personalidad que merece el respeto y el reconocimiento que se le da en este salón.

Otra cosa que me parece importante del programa es la presentación de la editorial Marli Brosgen, el sistema de becas para escritores y la revista «Prisma». Este proyecto será explicado por su coordinadora Aitziber Conesa y por el presidente de la fundación y el sello Rafael Escudero. Ambos estarán acompañados por gente que sabe un poquito de escribir y vivir aquí y ahora como Pau Ferrón, Borja Alonso, Sofía Rhei, Aranzazu Serrano, Concepción Perea, Mercé Homar, Alejandro Marín, Fran Montero, Carlos Calleja, Leyre López, Aitziber Conesa o Rafael Escudero .

Otra forma de abordar el tema editorial es el que propone la editorial Minotauro con su serie de autores españoles Minotauro Laberinto. Van a hablar sobre el premio homónimo al sello y también sobre los títulos asociados con José Manuel Estébanez, Bruno Puelles, Vicky Hidalgo, Manolo Dos, Cristina Macia, Fabián Plaza, Aranzazu Serrano y Darío Díaz Anzalone.

Para este 2022 se ha publicado el tomo «Excelsius 2022» que incluye una selección de trabajos de Gema Bonnín, José Antonio Cotrina, Tamsyn Muir, Rafael Marín, Juan Jacinto Muñoz Rengel, L.X. Beckett, Ellen Kushner, Delia Sherman, todos ellos estarán por allí para firmar el recopilatorio.

Hay muchas más presentaciones, claro: las novedades del catálogo de editorial Cerbero con su responsable Israel Alonso; la de «El mundo necesita a Delirium», de Rosa Gil, o la de «Héroes», de Pedro Ramos con Ángel Luis Sucasas dando vueltas por ahí.

De firmas internacionales tenemos presenciacas: Mariana Enríquez, Marianne Krawzick, Charles Vess, John Wagner, Neal Shusterman, Stephen Graham Jones, Grady Hendrix, Kiran Millwood Hargrave, Marie Lu o Chris Claremont, supongo que Jorge Iván Argiz buscará la foto con todos ellos. Es muy de fotos Jorge Iván.

Si compartís esta afición, va mucha gente maja: Covadonga González-Pola, Alba Quintas, Silvia Aliaga, Jesús Palacios, Laura Luna, Víctor Conde… más de cien plumas, que no quiero yo hacer de menos a nadie, pero es que las listas de nombres aburren mucho a los lectores.

Y para lectores y público quiero destacar los talleres: «100 días de escritura» con Gabriella Campbell, «Clase/exhibición de esgrima antigua» de la Escuela Asturiana de Esgrima Antigua, «Haz tu vela natural al estilo vikingo», «Tips para el uso de pintura corporal: bodypainting y cosplay» con Chaoko, «Taller infantil: Haz tu propia espada vikinga», «Fotografía para cosplay: cómo hacer tus propias fotos en casa y no morir en el intento», de Shiroychigo, «Taller infantil para jóvenes jedis», y «Tips para maquillaje de cosplay», de Skull Caramel.

También algo de cine con las proyecciones de «Los Nuevos Mutantes», «La guerra de los mundos», «Goonies» y «Dredd». Podcast, cosplay, rol, cómics, videojuegos, incluso algo de teatro con «Alicia desvelada», de Alba Quintas. Hay mucho que hacer por allí, sólo hay que mirar las distintas secciones en las que se ha planificado la organización: Letras y Bits, Jornadas de doblaje, las series de nuestra vida, Historia oculta de la música, Star Wars, Sociedad Tolkien Española, a las que hay que sumar la tradicional fiesta de disfraces, la entrega de los premios Kelvin 505, Premios Lorna y el Premio CIMA GAMES, sin olvidar el cachopo y la sidra propia de la tierra.

Eh, y que está el sorteo de la mega cesta. ¡Yo quiero la mega cesta! Trae todo esto:

Nº 15 de la revista «Windumanoth». «Las luminosas», de Lauren Beukes para RBA, y «El signo de los diez», de José Carlos Somoza para Espasa.

De la editorial Gamon:«Una bruja en el tiempo», de Constanza Sayers, «La hija de los huesos», de Andrea Stewart, «Rosa la sanguinaria», de Nicholas Eames, «Hombre muerto en una zanja», de Luke Arnold, «La plegaria de la calle», de Gareth Hanrahan, y «La campaña escarlata», de Brian McClellan.

De la editorial Alianza: «La voz de las Espadas», de Joe Abercrombie, edición ilustrada por Alejandro Colucci. De la editorial Gigamesh: «El Vosque», de Morán y Laurielle, «Los ojos bizcos del sol», de Emilio Bueso, y «Las aguas de Versalles», de Kelly Robson.

De la editorial La Biblioteca de Carfax: «El único indio bueno», de Stephen Graham Jones, «Entremedias», de Tananarive Due, y «Experimental film», de Gemma Files.

De la editorial Contraluz: «El mundo necesita a Delirium», de Rosa Gil. Dolmen: «Paramorfo», de Víctor Conde, y «Los cazadores del rey», de Rodolfo Santullo.

Nocturna: «Lo que permanece», de Andrea Tomé, «La flor y la muerte», de Iria G. Parente y Selene M. Pascual, «Los novios del invierno», de Christelle Dabos, y «Los dones de la muerte», de Raquel Brune.

De la editorial Cazador de Ratas: «Las cuatro de la luna negra», de Gloria T. Dauden, «Los jinetes del sueño», de Jesús Relinque, y «El triunfo de la alquimia», de Ludo Bermejo.

De la editorial Apache: «Planeta olvido», de Eva G. Guerrero, «El valle de las voces», de Salvador Bayarri, «Cuentos para Gaia», de varios autores, «Ethan», de Júlia Díez, «Orbis Tertius», de Jorge de Barnola, y «Los que susurran», de Elio Quiroga.

De la editorial Insólita: «Así se pierde la guerra del tiempo», de Amal El-Mohtar y Max Gladstone, «Ojalá tú nunca», de Javier Miró, «Sabio idiota», de Ricardo Montesinos, y «Nos devoró la niebla», de Marina Tena Tena.

De la editorial Minotauro: «La sombra de Dreinlar», de Bernard Torelló, y «Temores crecientes, de Manuel Dos. De la editorial Técon cerveza: «Las historias de la Hermana Herminia», y «Érase una puta vez», ambas de Sergio S. Morán.

De Editorial Cerbero: «Catalejos para mirar muy de cerca», de Maielis González, «Comas suspensivas», de Israel Alonso, «La compañía Amable», Rocio Vega, «Llamando a la Tierra», de Andrea Penalva, «Todos mis santos», de Manuel Ortiz, «Sabea: La ciudad de los 7 gremios», de Laura Morán Iglesias, «Evangelio de carne y metal», de Coral Carracedo, «Ecos de la tierra yerma», de Andrea Prieto Pérez, «Cartas agupianas», de Eduardo Norte, y «La Singularidad», de Sara Sacristán Horcajada.

Que de no tocaros, siempre podéis buscar los títulos en la zona de venta de editoriales y librerías; echad una manita anda.