Piezas inéditas y diseños icónicos recrean el universo de Jean Prouvé en esta muestra itinerante de Vitra
Arquitecto, herrero, diseñador… ¡Incluso alcalde! Jean Prouvé desarrolló su talento en innumerables disciplinas (y siempre con éxito), pero son sus icónicas piezas de mobiliario las que le encumbraron al Olimpo del diseño. “Para mí, Jean Prouvé es la respuesta francesa a Charles y Ray Eames” explica el presidente emérito de Vitra Rolf Fehlbaum, “todos comparten una combinación de honestidad estructural y una expresión creativa que se traduce en belleza atemporal”.
La marca suiza, que guarda una estrecha relación con la familia Prouvé, y produce una cuidada selección de sus diseños desde 2002, le rinde ahora homenaje ahora con una muestra itinerante en la que nos acerca a algunas de sus más aclamadas creaciones. La exposición, en Madrid hasta el 9 de febrero en el espacio Naharro Petrra, y del 16 de febrero al 6 de marzo en En Línea, en Barcelona, se estructura en ocho ‘capítulos’ que permiten adentrarnos en el trabajo del genio francés, y descubrir, no solo su amor por lo bello y funcional, sino también su maestría con los colores.
Una paleta inspiradora
Con un padre pintor y una madre pianista, la sensibilidad artística de Prouvé estaba más que garantizada. A pesar de que defendía “la naturaleza del material” y creía que solo debían pintarse los elementos que estuvieran en peligro, por ejemplo, de corrosión, el diseñador era consciente de la importancia de los colores a la hora de infundir cierta aura a sus muebles. “Mi padre elegía los colores con sumo cuidado, ¡por algo era hijo de un pintor!”, explica su hija Catherine. Así, Vitra rescata tonos como el Blé Vert, (trigo verde), el Gris Vermeer, (inspirado en la obra La lechera del célebre pintor), el Bleu Marcoule, el Bleu Dynastie y el acabado Metal Brut. Todos ellos se unen a los ya clásicos Japanese Red, Deep Black o Blanc Colombe del diseñador y crean una paleta irresistible que multiplica las opciones.