Provechosa excursión por la Sierra de la Culebra | El Día de Zamora

Hace cinco años que realizamos una excursión por los pueblos que comprende la Sierra de la Culebra. No podíamos prever entonces que cinco años después se presentaría el catastrófico incendio  que ha arrasado los bellos parajes que contemplamos en aquella época.

Una instructiva excursión por pueblos del Noroeste de la provincia, en la zona de la Sierra de la Culebra, promovida y patrocinada por la Diputación Provincial, dentro del Programa «Déjate Llevar por Zamora»; es la que hemos realizado el domingo, día 13 de agosto.

Nuestra primera parada fue en Tábara  para visitar el Centro de Interpretación de los Beatos.  Allí se nos dieron amplias explicaciones sobre el Beato de Tábara, códice del siglo X  de características mozárabes, que fue elaborado por los monjes del Monasterio de San Salvador.

La siguiente etapa fue para ver el bello pueblo de Villardeciervos, dando un paseo por la localidad en la que pudimos admirar sus amplias mansiones , como la casa de los siete balcones y otras construidas en piedra, de elegante arquitectura, todo un conjunto urbano que bien merece la calificación de «El Pueblo más Bello».
A continuación, el autocar nos llevó hasta Sagallos, donde se nos mostró el Centro de Interpretación de la Miel. Allí se nos hizo una detallada descripción de la vida de las abejas, del proceso de elaboración de la miel y de las virtudes nutritivas de este producto.

Siguiendo las estribaciones de la Sierra de la Culebra, de cuyo macizo montañoso nos iba dando Eva, la Guía, detalles de sus orígenes y características, pasamos por el conocido Campamento de San Pedro de las Herrerías, hasta llegar a Alcañices, donde hicimos la parada prevista para la comida y para conocer los principales monumentos de la localidad. La Guía nos relató la histórica Concordia de 1297 y visitamos el Convento e Iglesia de  los Franciscanos.  También hicimos una visita panorámica para ver la emblemática Torre del Reloj.
Terminada la vista a Alcañices, realizamos la última parada en San Pedro de la Nave,  la maravillosa Iglesia visigótica del siglo VII, que fue trasladada, piedra a piedra, para que su antiguo emplazamiento fuera inundado por las aguas del Embalse de Ricobayo.

Finalizado este provechoso itinerario por los pueblos de nuestra provincia, agradecemos a la Diputación Provincial la oportunidad que nos ha brindado de disfrutar de tan interesante jornada de forma gratuita, y damos las gracias también a Eva que cumplió muy bien con su misión de Guía turística.
Balbino Lozano,

13 agosto 2017