Vistazo a la vida de una de las minorías de Azerbaiyán · Global Voices en Español
Uno de los grupos étnicos de Azerbaiyán es conocido como «juhuro», o «dağ yəhudiləri» en azerbaiyano, es decir judíos de montaña. Sus orígenes se rastrean a Persia. Actualmente, hay migrado masivamente a Israel y otros lugares, pero algunos persisten en Azerbaiyán, y la comunidad tiene un importante rol en las relaciones entre ambos países.
A la comunidad también se le conoce como יהודי קווקז (yehudey kavkaz), o judíos del Cáucaso, desciende de judíos persas y vive predominantemente en Azerbaiyán, con grupos mucho más pequeños en Rusia y el norte del Cáucaso. Se estima que son entre 20 000 y 50 000 y su centro cultural Qırmızı Qəsəbə (aldea roja o Krasnaya Sloboda) en el distrito administrativo norteño de Guba en Azerbaiyán, ciudad enteramente poblada por judíos de montaña, mientras otros viven en la capital, Bakú, y otros lugares en todo el país. Según algunas fuentes, la aldea es la «única completamente judía fuera de Israel y Estados Unidos».
Dado su origen persa, su idioma tradicional es judeotatí, también llamado localmente juhuri, idioma persa que mezcla palabras persas, hebreas y túrquicas que en su historia ha usado el alfabeto hebreo, latino y cirílico. Los judíos de montaña tienen su propia tradición de judaísmo, que es diferente al de las comunidades eskenazi y sefardí.
Con la caída de la Unión Soviética en 1991, muchos conflictos en el norte y sur del Cáucaso, una difícil transición económica, una gran parte de la comunidad se fue a Israel, donde ahora se estima que hay entre 100 000 a 150 000 personas, como explica este documental:
Siguen manteniendo fuertes vínculos con Azerbaiyán, sobre todo con Qırmızı Qəsəbə donde construyen mansiones y regresan durante el verano, como muestra la exhibición «La historia de un pueblo» en Q Gallery en Berlín
Ciertamente, los judíos de montaña, ya incorporados al Imperio ruso a comienzos del siglo XIX, pudieron ser propietarios de tierras y desarrollaron sus propias industrias locales de seda y elaboración de alfombras, y tabaco y vinos. La exhibición se dedica a la fabricación de alfombras, actividad predominantemente femenina que se exhibe en la galería con alfombras, fotos y pinturas.
Acá, una alfombra celebra a las tejedoras de alfombras, parte clave del orgullos familiar y decoración de todos los hogares:
Esta foto de 1937 muestra a un grupo de tejedoras de alfombras de Qırmızı Qəsəbə:
Otra tejedora de alfombras muestra su alfombra:
Este cuadro es de la vieja sinagoga de Qırmızı Qəsəbə, de Rami Meir: